Las joyas de la corona desempeñan un papel importante y simbólico en las coronaciones de los monarcas británicos. Los ornamentos de la coronación -que incluyen objetos sagrados como la corona de San Eduardo, cetros y espadas que datan de siglos pasados- representan los poderes y responsabilidades del monarca. Cuando no están en uso, se salvaguardan en la Torre de Londres.
Mientras el Reino Unido se prepara para su primera coronación en 70 años, siga leyendo para saber qué joyas u objetos de coronación podrá ver durante la ceremonia del 6 de mayo del rey Carlos III y la reina Camilla.
La Ampolla y la Cuchara de coronación
Durante la coronación, el arzobispo de Canterbury ungirá al rey Carlos y a la reina Camila con aceite sagrado a través de la ampolla y la cuchara de coronación .
La ampolla está hecha de oro y moldeada en forma de águila con las alas extendidas; el aceite consagrado se vierte a través de su pico. Originalmente fue creado para la coronación de 1661 del rey Carlos II.
Mientras tanto, la cuchara de coronación dorada es el objeto más antiguo entre las insignias de coronación, data de al menos 1349. También es la única pieza del trabajo de los orfebres reales que sobrevivió desde el siglo XII, ya que una vez perteneció potencialmente al rey Enrique II (1133-1189) o el rey Ricardo I (1157-1199).
Mazas
En la coronación del 6 de mayo se utilizarán dos mazas. Estas mazas, que datan del siglo XVII, están hechas de plata dorada sobre roble. El palacio de Buckingham señala que «son los emblemas ceremoniales de autoridad que se llevan ante el soberano en actos como la Apertura de Estado del Parlamento».
Espadas
La espada del Estado
La espada de Estado se fabricó en algún momento del reinado de Carlos II en el siglo XVII. Consta de una hoja de acero con empuñadura de plata dorada, encerrada en una vaina de madera cubierta de terciopelo y con el escudo de armas del rey Guillermo III. Se utilizó en la investidura del príncipe de Gales en 1969.
La Espada de la Justicia Temporal
La Espada de la Justicia Temporal, que simboliza el papel del monarca como Jefe de las Fuerzas Armadas. Consta de una hoja de acero afilada en forma de hoja, una empuñadura de hierro dorado con empuñadura de madera y alambre, y una vaina de cuero forrada de terciopelo. Es una de las tres espadas fabricadas para la coronación del rey Carlos I en 1626. Durante la procesión de coronación, las tres espadas se llevan desenvainadas y apuntando hacia arriba.
La Espada de Justicia Espiritual
La Espada de la Justicia Espiritual, que representa al monarca como Defensor de la Fe, es la segunda de las tres espadas fabricadas para la coronación de Carlos I. Incluye una hoja de acero con una marca de marcador en la parte superior, una empuñadura de hierro dorado con empuñadura de madera y alambre, y una vaina cubierta de terciopelo.
La Espada de la Misericordia o Curtana
La Espada de la Misericordia, que simboliza la misericordia del soberano, es la tercera espada fabricada para la coronación de Carlos I. También presenta una hoja de acero, una empuñadura de hierro dorado y una vaina recubierta de terciopelo.
La Espada de la Ofrenda
La Espada de la Ofrenda, que se fabricó en 1820 y se usó por primera vez en la coronación del rey Jorge IV, incluye una hoja de acero montada en oro y engastada con joyas, así como una vaina de cuero cubierta de oro. Se utilizó por primera vez en la coronación de 1821 del rey Jorge IV.
Bastón de San Eduardo
Se cree que el bastón original perteneció a San Eduardo el Confesor, y fue recreado en 1660, aunque ya no se recuerda su finalidad original. Presenta una vara de oro cónica con diseños decorativos a lo largo del báculo, rematada con una cruz en la parte superior y una pica de acero en la parte inferior.
Espuelas
Las espuelas que se utilizarán durante la coronación del 6 de mayo se fabricaron originalmente en 1661 para Carlos II. Están hechas de oro, cuero y terciopelo, y simbolizan el título de caballero.
Armills
Dos brazaletes de oro, llamados Armills, se colocarán en las muñecas del Rey durante la coronación del 6 de mayo. Concebidos como antiguos símbolos de caballería y liderazgo militar, estos brazaletes se fabricaron para la coronación de la reina Isabel II en 1953, en sustitución de los anteriores, que databan del siglo XVII.
El Orbe del Soberano
Este orbe dorado del siglo XVII está dividido en tres secciones por bandas con incrustaciones de joyas que representan los tres continentes conocidos en la época medieval. Incluye varias esmeraldas, rubíes, zafiros, diamantes y perlas.
El anillo del Rey
El arzobispo de Canterbury colocará el anillo del Soberano en el cuarto dedo del monarca durante la ceremonia de coronación. Hasta el siglo XX, todos los monarcas tenían un anillo nuevo para su coronación. Este anillo en concreto se fabricó para la coronación de Guillermo IV en 1831, quien posteriormente lo entregó a su viuda, la reina Adelaida, que a su vez lo entregó a la reina Victoria. Todos los monarcas han utilizado el anillo de coronación de Guillermo IV desde la coronación del rey Eduardo VII en 1902 en adelante.
Un experto en joyería de Steven Stone estima que el anillo cuesta unas 350.000 libras, o unos 440.000 dólares.
Los cetros
El cetro del soberano con la Cruz
El cetro del soberano con Cruz simboliza el poder temporal del monarca. Fabricado originalmente para Carlos II, incluye una vara de oro coronada por una estructura esmaltada en forma de corazón. En 1910 se añadió el controvertido diamante Cullinan I, que para muchos representa el violento legado colonial del imperio británico.
El cetro del soberano con la Paloma
El cetro del soberano con Paloma, fabricado en 1661, simboliza el papel espiritual del monarca. Incluye una vara de oro con incrustaciones de joyas rematada con una paloma esmaltada, que representa al Espíritu Santo.
La Corona de San Eduardo
El rey Carlos será coronado con la Corona de San Eduardo, utilizada tradicionalmente como corona de coronación desde el siglo XVII. El tocado se fabricó para el rey Carlos II en 1661 y pretendía sustituir a la corona medieval original, que se fundió en 1649.
La corona de San Eduardo imita el diseño original al incluir cuatro cruces patadas, cuatro flores de lis y dos arcos. La corona incluye además un capuchón de terciopelo púrpura intenso, una banda de armiño, un remate de orbe y cruz, un marco de oro macizo y abundantes gemas como rubíes, amatistas, zafiros, granates, topacios y turmalinas.
La Corona del Estado Imperial
Tras la ceremonia de coronación, el Rey cambiará la Corona de San Eduardo por la Corona Imperial de Estado, que lucirá al salir de la Abadía de Westminster. La última vez que se vio esta corona fue sobre el féretro de la reina Isabel durante su funeral el pasado mes de septiembre.
El diseño, que se hizo para la coronación del Rey Jorge VI en 1937, incluye una montura de oro calado con tres grandes piedras y 2.868 diamantes engastados en plata, así como 17 zafiros, 11 esmeraldas y 269 perlas engastadas en oro. También lleva un capuchón de terciopelo púrpura ajustado y una banda de armiño.
La Corona Imperial de Estado lleva el controvertido Cullinan II, también conocido como la Segunda Estrella de África, que fue extraído en Sudáfrica en 1905 y posteriormente entregado por la fuerza a la Familia Real británica. Desde entonces, el Cullinan II y sus piedras hermanas han suscitado llamamientos para que la familia real devuelva los diamantes a Sudáfrica, ya que cada vez más gente critica su papel en el saqueo de tierras colonizadas.
La Corona de la Reina María
Camilla será coronada con la corona de la reina María de Teck, lo que supone la primera vez en la historia reciente que se reutiliza una corona ya existente para la coronación de la consorte en lugar de fabricar una nueva, según el palacio de Buckingham.
Antes de la coronación, la corona se reajustará sin el polémico diamante Kohinoor -cuyo origen se discute, pero que ha llegado a simbolizar el violento dominio colonial de la Familia Real británica sobre la India- y se sustituirá por los diamantes Cullinan III, IV y V, una elección hecha para rendir homenaje a la difunta reina Isabel II, ya que estos diamantes procedían de su colección personal de joyas. Sin embargo, el canje ha suscitado críticas de muchos historiadores y activistas, que han señalado que los diamantes Cullinan se extrajeron de Sudáfrica y, por tanto, siguen siendo reliquias del imperialismo británico.
La corona se fabricó originalmente para la coronación en 1911 de la reina María, consorte del rey Jorge V.
El anillo de la Reina Consorte
Durante la coronación de la reina Camilla, el Arzobispo de Canterbury colocará el anillo de la reina consorte en el dedo de Su Majestad. Esta pieza de joyería, que se fabricó originalmente para la reina Adelaida en 1831, presenta un rubí octogonal de talla mixta engarzado en oro y bordeado por 14 brillantes en forma de cojín, además de 14 rubíes graduados de talla mixta engastados en el vástago de oro. Desde la reina Adelaida, otras tres reinas consortes han sido obsequiadas con el anillo: la reina Alexandra, la reina María y la reina Isabel, la Reina Madre.
Un experto en joyería de Steven Stone estima que el anillo de la reina consorte cuesta unas 400.000 libras esterlinas, o 500.000 dólares. Eso es al menos 50.000 libras (unos 60.000 dólares) más que el anillo que Carlos llevará durante el servicio.
La Vara de la Reina Consorte con la Paloma
Esta pieza de 1685, que refleja el Cetro del Soberano con paloma, está destinada a «simbolizar la equidad y la misericordia», y el remate de paloma con alas plegadas representa al Espíritu Santo. Se compone de una vara de marfil, unida por collares de oro cincelados con hojas de acanto, rematados por un monde de oro esmaltado con los emblemas nacionales y una cruz.
El Cetro de la Reina Consorte con la Cruz
El Cetro de la Reina Consorte con Cruz se fabricó en 1685 para la coronación de la reina María, consorte del rey Jaime II. El diseño original incluía diamantes y piedras preciosas, pero posteriormente se sustituyó por cristales de roca. Las tres secciones de la vara de oro están unidas por collares montados con piedras talla rosa. Su remate presenta un monde engastado en medio de pétalos engastados de cuarzo, así como una cruz con cuarzos tallados y tallados en forma de rosa.
Vía: Harper’s BAZAAR US
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