Sienna Miller ha demostrado con creces su maestría para crear acertados looks en sofisticados eventos o sobre la alfombra roja. Hace tan solo unos días hacía gala de ello en la premiere de Anatomía de un escándalo con un favorecedor vestido azul empolvado de Self-Portrait. Un don que la intérprete mantiene a la hora de pisar el asfalto, de elegir combinaciones para el día a día.
Precisamente sus alabados estilismos protagonizados por vestidos babydoll y botas, shorts o chalecos, y elecciones donde destacan los tonos blancos, le han situado como un gran referente del estilo bohemio. Es en esta posición donde Miller se siente cómoda y así lo reflejan cada una de sus apariciones públicas.
Sin ir más lejos, el pasado lunes, la actriz acudía a una fiesta en Ibiza y lo hacía con un sencillo pero acertado estilismo formado por pantalones blancos estilo flare de talle alto y top abotonado con encaje en tono nude. Una combinación básica, propia de los meses de sol, a la que sumaba un rompedor cinturón estilo boho en camel y rojo que aportaba el toque más especial.
En cuanto a complementos, Sienna no quiso sumar nuevos colores y optó por mantener la sintonía del look con botas blancas y bolso de mano en esta misma tonalidad. Unos pendientes maxi en dorado ponían el broche final.
Un look que de alguna manera, sea por la sencilla fusión de tonos o por el uso de este tipo de calzado, a priori enfocado en los meses de entretiempo, nos hace rememorar nuestra adolescencia, donde precisamente las botas blancas tenían un lugar muy importante.
Hace varias temporadas que este tipo de elecciones dosmileras destacan en el feed de Instagram o lo que es lo mismo despiertan la atención de las que más saben de moda. No solo las propuestas que bien podrían haber sido sacadas de nuestro álbum de adolescencia, también algunas de las tendencias más destacadas de la época. Los pantalones vaqueros de talle bajo, las camisetas con logo, las chaquetas toreras de punto…
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