El misterioso maletín del rey Juan Carlos que no ha pasado desapercibido en la boda de Hussein de Jordania

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    A pesar de que el rey Juan Carlos y la reina Sofía ya no hacen vida juntos, pues viven a más de 7.500 kilómetros el uno del otro -él en Abu Dhabi y ella en Madrid-, este jueves 2 de junio volvían a juntarse. Tras coincidir en el entierro del rey Constantino de Grecia el pasado mes de enero, ahora se han visto las caras en la boda del príncipe Hussein de Jordania con la arquitecta Rajwa Al-Saif. Con una invitación personal, los eméritos han sido lo más parecido a la representación de la Familia Real española en el enlace, ya que, a diferencia de otras monarquías, Leonor sigue siendo la gran ausente en citas de este tipo, y aunque la foto de los dos juntos era lo más buscado, ha habido un detalle que nos ha hecho preguntarnos: ¿qué es eso que lleva el guardaespaldas del rey?

    Ayudado por su seguridad personal para poder saludar a los reyes de Jordania en la recepción, el emérito llegaba al palacio de Zahran cogido del brazo de su escolta, mientras la reina Sofía caminaba a unos pasos de distancia de él. La reina protagonizaba un ‘divertido’ momento saltándose el protocolo al adelantar al rey por su derecha para saludar corriendo a Abdalá y Rania efusivamente, pero algo que llamaba aún más la atención era el maletín que el guardaespaldas llevaba en su otra mano.

    Al parecer, se trata de un maletín balístico, un artefacto de protección extensible hecho con material antibalas para el rey en caso de haber algún tipo de atentado, de modo que, de haber algún susto, desplegarlo y poder refugiarle con seguridad protegiendo las zonas más sensibles: cabeza y tronco. No es algo raro entre grandes personalidades (el rey Felipe VI utiliza dos y el presidente del Gobierno también los lleva) ni en este tipo de eventos, pero sabiendo que la seguridad era máxima esos días en todo el país, y especialmente en las inmediaciones del palacio de Zahran, sí extrañó esta protección ‘extra’ cuando apenas nadie más lo llevaba. El rey, por otro lado, tuvo que echar mano de otros ayudantes cuando utilizó su silla de ruedas, en la que cada vez es más frecuente verle debido a sus problemas de salud, especialmente con la rodilla y la cadera.




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