El emblemático restaurante Carbone de Nueva York, de estética retro y platos tradicionales italianos, ha sido testigo del lanzamiento que ha paralizado la industria de la moda: la colaboración entre Zara y el diseñador estadounidense Narciso Rodríguez.
Tras anunciar una colección en la que la firma gallega ha buceado en el archivo del creador para poner a la venta una cápsula de 25 piezas, Marta Ortega, presidenta de Inditex, reunió a un íntimo de amigos en este restaurante neoyorquino para celebrar la unión con Narciso Rodríguez, también presente en la velada. Entre ellos no faltó el dúo de fotógrafos Inez van Lamsweerde y Vinoodh Matadin, el periodista y socialité estadounidense Derek Blasberg, el estilista británico Guido Palau, Patrick Li, Elissa Santisi o el propio Carlos Torreta, entre otros.
Para la ocasión, que supone un punto de inflexión en la historia del buque insignia de Inditex, que por primera vez une fuerzas con un gran diseñador, Marta Ortega volvía a convertirse en la mejor embajadora de Zara. Para la velada no dudó en elegir uno de los vestidos que forman parte de esta nueva cápsula, que está disponible en la web de Zara desde este jueves.
Ortega se decantó por uno de los diseños más espectaculares de la colaboración. Se trata de un diseño midi sin mangas confeccionado en mezcla de lana que se ajusta a la perfección a la figura, cuenta con detalle drapeado en la cintura y un sencillo lazo en el cuello que aporta un plus de sofisticación. En un atractivo tono naranja intenso resulta perfecto para cualquier cita nocturna, como bien ha demostrado Marta Ortega en Nueva York.
El precio es de 139 euros, pero tal ha sido el impacto logrado entre los fieles de la marca gallega que apenas unas horas después de ver la luz está agotado en todas las tallas.
Esta colección subraya el rumbo que ha tomado este 2022 la archiconocida firma gallega, cada vez más ligada a la exclusividad, y que coincide con el nombramiento de Marta Ortega como presidenta. La imagen sobria y potente que refleja este nuevo trabajo no deja nada al azar. La elección de la modelo Natalia Vodianova como imagen de la colección, el minimalismo detrás de los retratos, el juego del blanco y negro en los retratos de Craig McDean… todo forma parte de un imagen cuidada al milímetro que hace de esta colección un paso fundamental en el presente y futuro de Zara.
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