Cada vez que una royal aparece en público, hay una nueva lección de estilo. Cuando además se produce una visita de Estado, la elegancia sale a relucir en su máximo esplendor, como hemos podido comprobar en la más reciente, durante el encuentro de Máxima de Holanda y el rey Guillermo de Orange con la realeza sueca.
En una de las últimas jornadas en las que se han dejado ver juntos, fue el look escogido por la princesa Sofía de Suecia el que más atención acaparó por ser una de las apuestas más acertadas para lucir en una ocasión festiva. La escandinava asistió con su familia al concierto del violinista del Tim Kliphuis, en la Sala de Conciertos de Estocolmo, luciendo un favorecedor y llamativo vestido de lentejuelas azul largo con el que no necesitó prácticamente nada más para volver a demostrar que es una gran exponente de estilo.
Rindiendo honor a la moda sueca, la royal se decantó por un diseño de corpiño holgado, con cuello redondo, hombreras y mangas caídas en cascada que se ceñía a su cintura resaltando su figura. El modelo, de la firma Ida Lanto Couture, destacó especialmente por ajustarse a su cadera y contar con una falda con estructura de sirena, una de las tendencias más vistas del año sobre alfombras rojas y eventos de renombre.
El broche final fue un look de belleza protagonizado por un recogido en forma de trenza baja sobre la espalda que dejaba ver unos pendientes largos de zafiro, también azules, con forma de pluma de la marca Ebba Brahe. Un clutch negro con brillo y unos zapatos de salón metalizados con tacón ancho de la firma Stinaaj, completaron su propuesta.
Esta elección estilística de la princesa se impone como una opción de lo más acertada para inspirarnos de cara a los próximos eventos festivos. Una propuesta ideal tanto para un evento de gala como para una fiesta de las que se alargan hasta altas horas de la madrugada.
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