Julianne Moore ha sido una de las primeras en llegar a Venecia para la celebración de la 79º edición del Festival de Cine, una cita marcada en rojo dentro de la industria cinematográfica que supone el pistoletazo de salida al nuevo curso, reúne a los rostros más aclamados del sector y consigue situar la afamada ciudad italiana como epicentro mundial durante los próximos días.
La icónica actriz cuenta con un papel fundamental en este nueva edición, ha sido nombrada presidenta del jurado del festival más antiguo del mundo, tomando el testigo de Bong Joon-ho. Una labor que, como ella misma manifestó hace algunos meses cuando se hizo oficial el nombramiento, «es un gran honor».
A su llegada al aeropuerto, Moore ha vuelto a hacer gala de su elegancia nata con un look repleto de básicos que confirma el éxito del menos es más y demuestra, una vez más, que se mueve con la misma soltura entre estilismos de alfombra roja y propuestas en clave casual.
La intérprete ha seguido una fórmula que nunca falla: pantalones vaqueros, en esta ocasión de talle medio y corte recto, camiseta blanca clásica, blazer cruzado en azul marino y botones dorado de Gucci y como toque final, mocasines negros, un infalible a la hora de pisar el asfalto.
Bolso de lona de tamaño medio que combinaba varios colores, también firmado por la casa italiana, y gafas de gran tamaño, una tendencia al alza esta temporada de sol, completaban una propuesta que despertaba el interés de sus fanáticos.
Con ella, Julianne Moore volvía a demostrar el poder de los básicos de fondo de armario para crear un auténtico lookazo, incluso sobrio y elegante. Más allá de las nuevas y atrevidas tendencias que cada temporada ven la luz en materia fashion, existen piezas capaces de solucionar cualquier quebradero de cabeza. Sea para el día o para la noche. La clave, como en todo en cuestiones estilísticas, está en encontrar la combinación adecuada y ahí, la popular actriz ha demostrado ser una de las mejores.
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