Con la marcada ausencia de la reina Isabel, el Royal Albert Hall de Londres ha acogido el concierto anual con motivo de la celebración del Día del Recuerdo. Esta celebración rinde homenaje a los veteranos de las Fuerzas Armadas que han servido al país desde la Primera Guerra Mundial. Sin duda un día muy significativo en el que el rey Carlos III ha sido el encargado de presidir el emotivo acto. A su lado, su heredero, el Príncipe Guillermo, y su mujer Kate Middleton, ambos de riguroso negro.
Para esta ocasión Kate Middleton ha querido repetir un atuendo que ya lució este verano, pero lo ha hecho con un cambio significativo. Y es que si el pasado junio escogió el atuendo en blanco, esta vez ha preferido el negro. Se trata de un vestido de Self-Portrait, confeccionado en crepé y gasa cuyo diseño simula ser un conjunto de chaqueta y falda midi. La parte superior del mismo toma la forma de una americana con un cinturón del mismo tejido que se ciñe a la cintura y del que nace un péplum. Por debajo de este una falda plisada cuyo bajo está decorado con una gran franja de encaje negro, que deja al descubierto parte de las piernas de la Princesa.
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Como complementos, al igual que el resto de miembros de la Casa Real ha lucido la clásica amapola sobre la solapa y en la mano ha llevado el clutch Bayswater de Mulberry. Y Kate ha querido hacer un guiño a la difunta Reina, luciendo en su cuello un collar de perlas de tres vueltas que perteneció a esta -y que no es la primera vez que luce la esposa del Príncipe Guillermo-.
Kate Middleton escogió este mismo atuendo, en blanco, para asistir el pasado 5 de junio a la Platinum Party en el Palacio de Buckingham, uno de los actos de las extensas celebraciones del Jubileo de Platino que conmemoraron los 70 años de reinado de la reina Isabel.
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