El verano aún no ha terminado, y Sharon Stone está disfrutando hasta el último minuto de su tiempo al sol.
La actriz de 64 años compartió un selfie en bikini en Instagram que mostró sus abdominales mega tonificados y su confianza contagiosa.
Además, su gran sonrisa es suficiente para alegrar el día a cualquiera, brille o no el sol.
«¿Por qué siempre me pongo en forma cuando se acaba el verano?», subtituló la intérprete junto a un selfie en el espejo. Por suerte para Stone, sus esculturales abdominales no pasaron desapercibidos a pesar de estar en la recta final de la temporada de sol.
De hecho, sus seguidores no parecían centrarse en otra cosa.
«Señora, siempre estás en forma para arrasar», decía uno. Otro escribió: «Todavía lo tienes, cariño».
Un tercer seguidor la tranquilizó diciendo: «El verano no se acaba nunca». Estoy de acuerdo: siempre hay tiempo para un momento en bikini.
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Cuando se trata de su rutina de ejercicios, «todo lo que tienes que hacer es moverte», declaró en una reciente entrevista a Vogue.
Stone adopta un enfoque único para ponerse en forma que no siempre implica ir al gimnasio.
«La gente cree que hay que ir al gimnasio y hacer pesas todo el tiempo, pero no es así».
Sharon intenta mantenerse activa dondequiera que esté. «Periódicamente a lo largo del día, muevo el cuerpo. Lo hago cuando estoy en el set. Levanto las piernas, doy patadas en la espalda, me tiro al suelo y hago algunos saltos», declaró a la misma publicación.
Eso explica esos abdominales.
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Stone también hace ejercicio viendo la tele. Una de sus herramientas favoritas es el Suzanne Somers ThighMaster.
«Me lo pongo entre las piernas mientras veo la tele, y mis hijos y todos sus amigos adolescentes piensan que es divertidísimo, pero también lo hacen», afirmaba.
Stone se revisa a si misma a diario para asegurarse de que da a su cuerpo y a su mente lo que necesitan para prosperar: «Tenemos que preguntarnos, ¿hemos contribuido hoy a nuestro bienestar corporal, mental y espiritual?», explica a la cabecera.
Meditar le ayuda con estos controles diarios, y Stone disfruta de las escrituras budistas de Bukkyo Dendo Kyokai para centrar su mente, según la publicación.
Stone sufrió un derrame cerebral casi mortal en 2001, y tardó siete años en recuperarse. En una entrevista con Oprah, Stone declaró que había perdido su «resplandor» durante ese periodo de su vida.
«Es un resplandor y un magnetismo, una presencia… que proviene de la salud, el bienestar y la juventud. Creo que también proviene de la confianza», añadió.
Pues bien, está claro que Sharon ha recuperado su resplandor. Está tan sana y feliz como siempre.
Vía: Women’s Health US
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