‘Secretos de Familia’: el resumen final del capítulo 13 de la serie turca

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        Los celadores encontraron a Engin inconsciente en su celda en el capítulo 13 de Secretos de Familia. Rápidamente, llamaron a una ambulancia y le trasladaron al hospital. Mientras tanto, el director de la prisión le comunicó lo ocurrido a los padres del recluso, así como a Ceylín, Pars e Ilgaz. Todos se presentaron en la clínica para interesarse por el estado del paciente en Secretos de Familia.

        Pasaron las horas y los doctores realizaron una serie de exámenes a Engin. Los resultados fueron reveladores: el joven había sido envenenado. Yekta pidió explicaciones al jefe de la prisión, quien revisó, palmo a palmo, la celda del reo, pero no encontró ninguna sustracción tóxica.

        La investigación derivó a Eren y Metin. Ambos echaron un segundo vistazo al cuarto y hallaron el libro de la abogada Shaver. Tras realizar los análisis necesarios, confirmaron que en sus páginas es donde se encontraba el veneno. «Hemos examinado, también, las huellas dactilares y son de Seda», le dijo Eren al fiscal Pars. Este último llamó a la abogada y le contó lo que han averiguado.

        Seda se defendió de las acusaciones de Pars, asegurando que alguien le robó el libro de Shaver. «Choqué con un repartidor en la calle y cuando me quise dar cuenta, el libro no estaba entre mis cosas», explicó la abogada, quien defendió su inocencia.

        A continuación, Seda llegó hasta el hospital para interesarse por el estado de su sobrino y se topó con Ceylín, quien le contó lo que había ocurrido con Parla: «Mi sobrina ha estado a punto de morir por vuestra culpa». Seda, consciente del daño que habían causado, habló con Engin, que había recuperado el conocimiento y le retiró su ayuda: «No quiero ser la culpable de más atrocidades».

        Engin llevó a cabo un delicado plan de fuga con una inesperada polizón

        Horas más tarde, Yekta entró en la habitación de su hijo y le reafirmó su propuesta de ayudarle a escapar. «He entendido que no puedo dejarte solo en esto. Eres sangre de mi sangre, hijo mío», dijo mientras le abrazaba.

        Acto seguido, le explicó el plan de fuga:«Mañana te llevarán a hacerte una resonancia. Antes de ir, pedirás entrar en el baño. Ahí hay una ventana desde la que podrás saltar al parking, donde he dejado tu coche con la puerta abierta y las llaves puestas. Luego te llamaré y te diré donde vernos para darte el dinero necesario».

        Entretanto, Seda se dispuso a salir de la clínica y Merdan la abordó en plena calle. Con actitud amenazante, la arrinconó contra una pared y le advirtió que si volvía a meterse con Çinar, él sería capaz de atacar a quien más amaba: «Me enteré de que adoptaste a una niña. Supongo que no querrás que nada malo le pase». La abogada, muy asustada, le juró al mafioso que no haría nada más en contra de su familia: «Esta guerra no es mía, así que me retiro del campo de batalla».

        Por su parte, Eren se enteró de que Özlem no quería interponer una denuncia contra su marido Fatih por malos tratos, a pesar de que este casi la mató a golpes. El policía trató de hablar con Tügce para que hiciera cambiar de opinión a su madre, pero esta se negó.

        Al día siguiente, Engin se levantó y siguió al pie de la letra las indicaciones de su padre. Ceylín se encontró con él en mitad del pasillo y sospechando que algo raro ocurría, bajó al parking. Allí vio el antiguo coche de su amigo con las llaves puestas. «Va a escapar», piensa. Dispuesta a impedirlo, se subió a la parte trasera del vehículo. Pars e Ilgaz, que, también, sospecharon de las intenciones del recluso, fueron corriendo al hospital para evitar la fuga.

        Cuando cayó la noche, Ceylín se despertó en mitad de un bosque. La abogada tenía el rostro ensangrentado y varios moretones en todo el cuerpo. No recordaba qué era lo que había pasado. A su lado, yacía el cuerpo sin vida de alguien ¿De quién se tratará?

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