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En los capítulos de la semana pasada de El juego de mi destino Cemal no pudo soportar la idea de perder a su hijo pequeño por una terrible enfermedad y se derrumbó ante Asiye. Esta semana, en los capítulos 77 al 80 de El juego de mi destino comprobamos que, desde que Zahide se enteró del embarazo de Zuhal, no hay nadie en la mansión que no conozca la noticia. Mahir, preocupado por si el bebé es suyo, le pide a Zuhal que le diga la verdad. Pero ella, al comprobar que a Mahir no le hace ninguna ilusión convertirse en padre, le miente, asegurándole que el bebé que espera es de otro hombre.
Gracias a una pulsera que Meral le regaló a Zuhal, Raci descubre que su examante sigue en la ciudad y se apresura a visitarla. Meral confiesa que Zahide le amenazó para que rompiese con él y Raci le promete divorciarse lo antes posible.
Helin amenaza a Asiye con un cuchillo tras el rechazo de Cemal
Cemal se niega a seguir con Helin y esta acaba perdiendo la cordura, presentándose en casa de Asiye y amenazándola poniéndole un cuchillo en el cuello: «Arruinaste mi matrimonio, éramos felices hasta que tus hijos y tú aparecísteis. Pero ya no me preocuparé más, hice lo que tenía que hacer y por fin todo ha terminado». En ese momento, el sonido de varias sirenas de la policía alertan a Asiye.
Helin le ha denunciado a la policía y los agentes esperan en la puerta para detenerla. Sin embargo, antes de ponerle las esposas, Cemal aparece y se declara culpable del asesinato de Halil. Nergis abraza a su padre suplicándole que no se vaya, mientras Ugur, por primera vez, se despide de Cemal llamándole “papá”. Una vez en comisaría, Helin vuelve a delatar a Asiye exigiendo que liberen a su marido. Mientras, Cemal sonríe desde el calabozo, feliz de haber recuperado el cariño de sus dos hijos: «Ha merecido la pena».
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