Cada nueva temporada, hay que cambiar el neceser. Las necesidades de la piel no son las mismas que la temporada anterior, por lo que se requieren nuevos productos y nuevos ingredientes. Y si hay uno que esté ya dando de qué hablar ese es el escualano.
Es posible que aún no hayas oído hablar de él y que incluso te cueste pronunciar su nombre, pero sobre todo de cara a verano se va a convertir en un imprescindible por la hidratación que le aporta a la piel y por ser rico en antioxidantes, por lo que la protege de los radicales libres. Pero, ¿qué es exactamente?
¿Qué es el escualano?
«El escualano es un principio derivado de la oliva y que se forma por estabilización del escualeno.«, expresa Raquel González, directora de educación de Perricone MD. Es importante no confundirlo con el escualeno porque aunque ambos tienen como función principal hidratar la piel, el segundo lo hace pero tiene como efecto secundario producir granitos. Pero, el escualano al ser una evolución de este, suprime esa consecuencia: «El escualeno como tal es un ingrediente comedogénico. Para evitarlo, se estabiliza en laboratorio, convirtiéndolo en escualano, consiguiendo los mismos beneficios sin congestionar la piel», explica Estefanía Nieto, responsable técnica de Omorovicza.
«La mayoría de los ácidos grasos son positivos para la función barrera y la hidratación, pero con el escualeno ocurre que, al contrario que otros principios como el aceite de jojoba, puede producir imperfecciones», añade Catalina Narváez, directora de educación de Aromatherapy Associates.
Pero además no solo debemos incluirlo en nuestra rutina de belleza porque ayude a la hidratación de la piel, sino porque es un elemento básico en ella: «De base, forma parte de alrededor del 15% de las grasas naturales de la piel, pero a partir de los 20 o 30, se ralentiza la sintetización natural de este principio y, para mantener unos niveles óptimos, hay que acudir a opciones alternativas como la aplicación de uso tópico, siendo un activo cada vez más presente en más formulaciones«, expresa Elisabeth San Gregorio, directora técnica de Medik8, sobre el escualeno, aunque se aplica con el escualano para evitar reacciones.
Pero, ¿qué hace exactamente el escualano?
«La función principal del escualano es mantener la barrera hidrolipídica que protege a la piel de agentes externos y que evita que se pierda la humedad o agua, favoreciendo así un equilibrio óptimo de hidratación», explica Valeria Navarro, directora técnica de la firma Boutijour.
Esto hace que la eficacia de otros ingredientes se potencien y penetren mucho mejor en la piel: «El peso molecular juega un papel importante aquí, pero también otros ingredientes, como el escualano. Al ser un principio que produce el cuerpo, lo identifica como un agente propio, permitiendo así la penetración de diferentes ingredientes«, señala Elisabeth San Gregorio.
Además, es un potente antioxidante, por lo que es vital para proteger a la piel de los radicales libres y demás agresores externos que envejecen la piel.
¿Dónde encontrarlo?
Al potenciar su eficacia, es escualano siempre se encuentra en productos con diferentes ingredientes con grandes beneficios para la piel, como la vitamina C, tan de moda ahora en el mundo de la cosmética. En general, al ser un principio hidratante o que mantiene la hidratación, se incluirá en productos con estas propiedades, como los sérums o las cremas hidratantes.
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Esta crema hidratante de Omorovicza, aporta, gracias al escualano, ácidos grasos sin generar brillos, equilibrando el tejido con extractos frutales para reducir la producción de sebo y el tamaño de los poros; pectina de manzana con capacidad hidratante y cristales de rubí que reducen las imperfecciones. Pero el escualano también puede ser el ingrediente principal del cosmético en cuestión, teniendo ese la función de mantener la hidratación y luchar contra el envejecimiento neutralizando los radicales libres.
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