Tampoco hay que buscar ni innovar demasiado para dar con ingredientes cosméticos que son auténticos salvavidas de la piel. Y es que hay auténticos ingredientes prácticamente milagrosos que llevan con nosotros desde el principio de los tiempos. Uno de ellos es la centella asiática.
¿Qué es la centella asiática?
A pesar de formar parte de la cosmética coreana desde tiempos ancestrales, todavía es para muchos una desconocida. La centella asiática se extrae de la planta Gotu Kola de Asia. También es conocida como ‘la planta del tigre’ porque, según la leyenda, los tigres de Bengala curaban sus heridas revolcándose sobre plantas de centella asiática. Y es que, sus propiedades son, básicamente, curativas y regeneradoras.
¿Cuáles son las propiedades de la centella asiática?
La centella asiática es antiinflamatoria y ayuda a cicatrizar la piel: «Gracias a su gran contenido en derivados triterpénicos, la centella asiática aumenta la formación de fibroblastos e inhibe la fase inflamatoria de cicatrices hipertróficas y queloides, por lo que tiene gran capacidad de reparación de tejidos y heridas», cuenta Pilar Hernández Bonilla, fundadora de Bonaloa.
A esto hay que sumar que tiene poder antioxidante, protegiendo la piel de los radicales libres; es «venotónica» y tiene efecto antiedad o lo que es lo mismo, «mejora la circulación sanguínea y con ello, aporta más oxígeno y nutrientes a las células. Esto favorece el retraso de la aparición de arrugas y manchas de la piel», señala la experta.
También aumenta la formación de colágeno y es antifúngica y antibacteriana por lo que es perfecta para eliminar el acné. Además, al ayudar a cicatrizar, suavizará las marcas.
¿Dónde se puede encontrar la centella asiática?
La centella asiática se encuentra habitualmente en tratamientos cosméticos o en cremas de uso diario gracias a que, además de hidratar y dar firmeza a la piel del rostro, fomenta la activación celular. De esta manera, reduce la reducción de ácido hialurónico, colágeno y elastina, actúa como antioxidante y antiedad y repara el daño de la luz solar.
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