Brocha de maquillaje: claves para utilizarla correctamente

Brocha de maquillaje: claves para utilizarla correctamente

Parece obvio pero no lo es. Aunque la forma natural de aplicar un producto y en concreto, uno como la base de maquillaje, sería con brocha, beauty blender o cualquier otra herramienta que nos ayude a controlar el producto, por las prisas o pereza, muchas veces aplicamos y extendemos el maquillaje con las manos. Error.

Siempre siempre siempre se debe extender el maquillaje con la brocha y es que hay muchas razones para hacerlo. La primera de ella, la salud de la piel.

¿Por qué utilizar la brocha de maquillaje?

Las brochas hacen que el acabado sea uniforme y natural

Lo que ocurre cuando aplicamos el maquillaje con los dedos es que este no se reparte igual por todas las zonas del rostro, a diferencia de las brochas. Así lo confirman desde Guerlain, que: «Después de atrapar el producto, las brochas lo van soltando de manera uniforme sobre la piel. Además, permiten difuminar muy bien el resultado final para que el resultado resulte mucho más natural y no se aprecien ‘saltos’ de color en la piel«.

Al usar una brocha no se desperdicia producto

Cunde el doble, de hecho, tal y como aseguran desde la marca. «Con los dedos y la esponja hay que tomar más cantidad de producto, es más difícil calcular la dosis exacta y siempre hay excedente», explican.

En términos de higiene, las brochas son más limpias

En las manos se acumulan gran cantidad de bacterias, a pesar de que ahora las lavemos mucho más por el coronavirus. De hecho, aplicar el maquillaje ahora con las manos es hasta más peligroso. Extender el maquillaje con brocha hace que se mantenga, en este sentido la salud de la piel porque, además, solo se usa esa brocha para el rostro. Eso sí, hay que mantenerla también limpia porque las bacterias, aunque a más largo plazo, se seguirán acumulando: «Siempre que se mantengan limpias, minimizan al máximo la aparición de bacterias en el producto», señalan desde Guerlain.

Las brochas son ecológicas

«No requieren agua para su limpieza –como las esponjas y los dedos–. Basta con un pañuelo de papel. Además, tampoco hay que mojarla para aplicar el maquillaje como ocurre con las esponjas» y duran más.

Ayudan a masajear la piel

«Utilizándola como es debido, desde el interior del rostro hacia el exterior, se efectúa sobre la piel un ligero masaje de efecto firmeza». Y es que siempre es un extra mimarse en la rutina de belleza.




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