Cuenta la leyenda que el cazador Orión se enamoró de las siete hermanas Pléyades. Semejante dispendio de amor hizo enfurecer al gran Zeus, que celoso, las arrojó al cielo en forma de estrellas para alejarlas lo máximo posible de él. Se dice también que todavía hoy, demasiados siglos después, el cazador sigue buscándolas, y que cuando se ve desde tierra la constelación, es porque Orión las está mirando.
Esta fábula mágica y onírica es también inspiradora, y alrededor de estas estrellas giran, otra vez, las nuevas joyas de la colección Orion de Suárez, una constelación formada por piezas de oro rosa y diamantes que en el caso de los anillos, ganan un millón de puntos extra en elegancia si se llevan con las uñas rojas y cortitas; todo en tendencia y todo acorde.
Las ilustraciones de los artistas Cocorrina y Bruno Penabranca tienen mucho en común aun siendo completamente diferentes. El cosmos rige su arte y el negro y el dorado marcan los trazos de sus dibujos. Ambos parecen inspirarse en Orion, y semejante casualidad, si es que existen, no podía pasarse por alto en Suárez. "Fue una señal: había que convertir sus constelaciones ilustradas en joyas, de manera que el equipo se trasladó a Kefalonia, una isla de Grecia, donde la ilustradora se rodea de música, sol y animales para desarrollar sus creaciones, en las que destacan elementos astronómicos ligados al zodiaco", explica la marca.
© Cortesía Suárez
Lo mismo sucedió con Penabranca, cuyo trabajo minimalista pero mágico Suárez conocía de cerca. "Tras un viaje a Nueva York surgió un feeling especial y decidimos que el trabajo de Bruno inspiraría los diseños más geométricosdel nuevo Orion".
Dicho y hecho, Suárez creó los nuevos colgantes, pendientes y anillos de Orion de la unión de la estética de estos dos artistas, y el resultado es tan evocador como apetecible, pues mezcla estrellas y lunas con planetas y constelaciones, incluyendo también diamantes que simbolizan el Cinturón de Orión.
© Cortesía Suárez
Elegantes todas, elegir una única pieza es complejo, pero querer llevar todos los dedos de la mano enjoyados con sus finos anillos de oro rosa de 18 quilates u diamantes talla brillantes es lo más sencillo del mundo, pues si además eres de las que lleva siempre las uñas pintadas de rojo, tu nivel de elegacia de potenciará hasta niveles insospechados.
Elige los tuyos, hazte la manicura y mira al cielo. Seguro que encuentras la constelación que tanto buscaba Orión.
© Cortesía Suárez
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