Hablar de la pantera es hablar de la gran seña de identidad de Cartier. Desde su creación en 1914, y con una historia ligada a la figura de Jeanne Toussaint, este felino se ha erigido como un símbolo de la casa de joyería, un objeto de deseo y admiración.
A pesar de mantener el atractivo, la fuerza o el movimiento propias de la pantera heredados de Tousaint, la maison ha ido renovando este símbolo tanto en diseño como en uso con el paso de los años en la que se ha convertido en posiblemente su mayor éxito, la colección Panthère. Una amplia gama de impresionantes creaciones esculturales articuladas que incluyen desde el clásico y salvaje reloj de Cartier hasta collares, pulseras o anillos.
Para este 2022 y con el firme propósito de mantener la vitalidad y frescura de la colección Panthère, la maison ha incluido nuevas y felinas piezas que en esta ocasión destacan por la notable flexibilidad y el magnetismo, son «capaces de desplegarse sin necesidad de bisagras», como bien apuntan desde Cartier. Además, la imagen del animal juega un papel crucial pues en cada una de las piezas es posible observar un cara a cara, una metáfora que representa el abrazo al cuerpo.
Lo observamos tanto en el collar como en la pulsera de oro amarillo con manchas octogonales de laca negra o de oro blanco con pavé de diamantes y engastado con manchas de ónix. Se trata de una joya curvilínea que cuenta con dos esculturales cabezas de pantera enfrentadas con ojos de esmeraldas o granates tsavoritas en sus extremos.
Un lanzamiento que cuenta con dos nuevas embajadoras de honor, la actriz Milena Smit y la bailarina y coreógrafa Blanca Li. Mujeres de renombre en diferentes ámbitos que destacan por su arrolladora personalidad y fuerza, señas de identidad de la colección más emblemática de la maison. Nombres que pasan a formar parte a una familia de lujo donde encontramos a Julianne Moore, Maisi WIlliams o Lily Collins.
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