‘Café con aroma de mujer’, avance de los capítulos finales (94 al 98) de esta semana: Amor entre los cafetales

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              En los capítulos anteriores de Café con aroma de mujer, Gaviota quiso unir fuerzas con Marcia para demostrar la inocencia de Sebastián y sacarle de prisión. En los capítulos finales (94 al 98) de esta semana en Café con aroma de mujer, Doña Julia le ofrece a Gaviota el 25 % de la herencia de Octavio para su hijo Fernando. Sin embargo, la recolectora rechaza el regalo y propone utilizar tal fortuna para salvar la hacienda de los Vallejo. Mientras, Sebastián es declarado inocente del delito de lavado de dinero y, en su lugar, es apresado Iván, quien es condenado a varios años de cárcel por sus los delitos. Carlos Mario, por su parte, también, es detenido por narcotráfico, secuestro y multitud de crímenes más. Ahora Marcia podrá vivir sin tener que esconderse de su malvado esposo.

              Por otro lado, y pesar de todo lo causado, Lucía busca a Sebastián para disculparse por el daño que ha hecho y devolverle su anillo de bodas.La mujer le cuenta que ha conseguido un buen trabajo en Nueva York, por lo que se marchará en un par de días junto con Sofía: «Cuidaré de ella, lo juro».Un bonito momento que culmina con la aparición de Julia, que le desea toda la suerte del mundo a la que fuera su nuera y le da un tierno abrazo.

              Arthur y Paula continúan con sus coqueteos

              Con el paso del tiempo, Sebastián, acompañado de Julia, visita a Iván en prisión. Ambos hermanos liman asperezas y la matriarca del clan le promete a su primogénito que estará a su lado cuando salga de la cárcel.

              Meses más tarde, los coqueteos entre Arthur y Paula siguen siendo constantes, aunque, todavía, no formalizan su relación. Marcela comunica a la familia que ha decidido tener a su bebé. Algo que llena de dicha a su amado Lemarcus.

              La alegría de la familia culmina con la boda de Sebastián y Gaviota. Esta última, además, triunfa en los negocios, haciendo de su cooperativa todo un éxito comercial. Un broche de oro, para una historia dulce y amarga como el mejor café.


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