Kiko Matamoros y Elena Rodríguez se enfrentan por Adara: «¡Nunca vas a decir nada bueno de mi hija!»

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    La situación en Honduras está cada vez más tensa, y es que los concursantes de ‘Supervivientes’, que apenas llevan 3 semanas y media de concurso, ya están teniendo problemas con la comida. La última trifulca la ha protagonizado Adara Molinero al ver reducidas las porciones de arroz, y ha montado un cisco porque nadie le había preguntado antes de que el grupo tomara la decisión. Aquello le costó una bronca con Arelys y con Diego, plantándose en su tarea semanal e incluso terminaba llorando, y esa tensión se ha trasladado al plató, donde Kiko Matamoros y su madre, Elena Rodríguez, se han enfrentado con mucha tensión este pasado domingo.

    Mientras Elena defendía la postura de su hija, Kiko no lo veía así: «Lo anormal es la reacción de Adara diciendo que la tarea que se le ha asignado no la quiere hacer. Hay una respuesta absolutamente abrupta por parte de Adara y hay un comportamiento noble por parte de Diego. Eso es lo que he visto», explicaba él. Una opinión que, evidentemente, Elena no compartía. «¡Tú nunca vas a decir nada bueno de mi hija!», comentó. Hay que recordar que Kiko y Adara han tenido muchos enfrentamientos en el pasado, siendo el más grave en un ‘Deluxe’ en abril de 2020, tras la ruptura de ella con Gianmarco Onestini, donde él hizo un comentario que implicaba a su hijo y ella, muy enfadada, se levantó de su asiento y le llamó «hijo de puta».

    Además, hace unos días Kiko hizo un comentario con un dicho popular que a Elena le hizo «mucha gracia», y aprovechó con ello para lanzarle una pullita bastante edadista: «Dijo que (Adara) había tenido una idea ‘como el señor que asó la manteca’. Me reí mucho porque yo tenía un bisabuelo que hacía ese comentario comentario, que siempre estaba dormido y apoyado, por eso me hizo mucha gracia», a lo que Kiko le devolvió el revés: «Tu bisabuelo tenía mucho tiempo para pensar. Yo trabajo mucho, pero también pienso mucho». «Bueno…», apostillaba ella, no muy convencida. La tensión entre ambos, sin duda, va ‘in crescendo’…




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