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El pasado mes de enero arrancó la reemisión de la telenovela La tempestad en Divinity. En los capítulos de la semana pasada vimos cómo Úrsula le demostró su lealtad a Hernán cometiendo una locura que podía ponerla en peligro, mientras que Marina conoció la verdad sobre su origen y a su hermana Magdalena. En los capítulos 106 al 110 en La tempestad, Ernesto tenía preparada una prueba para que Hernán le demostrase que aún le era fiel. Debería quitarle su hijo a Esthercita y devolvérselo para que estuviese con su verdadero padre. Mientras tanto, a Mercedes no le quedó más remedio que entregarle las escrituras de la empacadora a Hernán, que no se conmovió ni un ápice por ella. Oso y Lagarto inauguraron su pescadería.
Al día siguiente, tras la desaparición de Michell, Damián puso patas arriba el pueblo en busca de su pequeño, solicitando, incluso, la ayuda de Fulgencio y del comandante Robles. Tanto el padre de Esthercita, como el oficial tenían un nombre en la cabeza como posible culpable: Hernán. No contento con su primera victoria, Ernesto le encomendó otro cometido a Hernán, esta vez relacionado con Marina y con Magdalena.
Hernán confesó el motivo de su odio a Ernesto
Por otro lado, Esthercita dijo estar embarazada del Damián, tras la supuesta noche de pasión que pasaron juntos. Esto destrozó el corazón de Marina, quien decidió alejarse de Damián. «No puedo estar contigo si vas a tener un hijo con otra mujer. Lo siento», dijo, dando por zanjada su relación.
Meses más tarde, Marina comenzó a tener dolores de parto. La llegada al mundo de su hija era inminente, por lo que no podía ir a un hospital. Rebeca la acostó en su cama y llamó al doctor del pueblo. Este atendió el alumbramiento, que fue duro y, también, complicado. Después de varias horas, la pequeña nació, pero lo hizo, aparentemente, muerta. Damián llegó en ese momento y sujetó a la niña entre sus brazos. Gracias al calor de su cuerpo, la recién nacida reaccionó. «Dios mío, gracias por obrar este milagro», dijo el capitán.
Por otra parte, Ernesto se presentó ante Esthercita, a quien obligó a regresar a su lado. Hernán, que estaba presente en este encuentro, le reprochó a Ernesto que le hubiera convertido en un monstruo al acogerle bajo su protección después de haber matado a sus padres cuando era aún pequeño.
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