Qué va a pasar en el capítulo final de ‘Infiel’, la serie turca de Antena 3

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        Volkan es detenido, acusado de estafar y robar a la familia Güçlü en Infiel. Derin sufre un nuevo brote psicótico, culpa a su madre de haber destrozado a su familia y, sin decir, hacia donde va, coge el coche y se marcha a toda prisa. En mitad del camino, llama a Asya y le dice que va a terminar con su sufrimiento, tal y como una vez debió hacer.

        La doctora entiende que Derin se dirige al acantilado en el que casi perdieron la vida en una ocasión. Pretende lanzarse al mar.Asya llega a tiempo de evitar que la joven se quite la vida. Tras consolarla y hacerle recapacitar, la arrastra tierra adentro y la abraza. Después, la lleva al hospital. Mientas los médicos la examinan, llama a Gönul y a Onur para ponerles al tanto de cómo está la paciente: «Deberá ser internada en un psiquiátrico para recuperarse», le dice la médico a Gönul. Esta, a su vez, le da las gracias por haber salvado a su hija.

        Un mes más tarde, Derin, que ya se ha repuesto, totalmente, abandona la clínica de reposo mental acompaña de su madre y de Onur, que no se ha separado de ella.Lo primero que hace es visitar a Asya y agradecerle por haberla ayudado en el peor momento de su vida. Después, siguiendo el consejo de la doctora, retira los cargos en contra de Volkan. Ni Zeynep, ni Ali se merecen tener a su padre en prisión.

        El arquitecto, finalmente, es liberado el mismo día en el que Demir y Ali, que han vuelto a ser amigos inseparables y han cortado su relación con Ipek, se gradúan. Volkan, nada más llegar, ve a todos felices y a Onur, sosteniendo a su hija en brazos. Pierder el control y monta un espectáculo en mitad de la celebración. Derin, que ya no siente ese amor enfermizo por él, le exige que se vaya: «Ahora estás solo y arruinado, como siempre debió ser».

        El hombre, desolado, se va del lugar y, a punto, está de ser atropellado por un coche. Asya siente lástima de él y le acerca hasta la casa que era de su madre, para que viva allí. Acto seguido, le da la noticai de que, tanto ella como Ali, se marchan a Londres y abandonan Tekirdag para siempre: «Adiós».

        Por otro lado, Ceren ha comprendido que no puede forzar a Selçuk a estar a su lado y verle tan feliz al lado de Nil, le hace mucho daño. Así pues, la joven decide marcharse a Estambul y rehacer ahí su vida. Eso si, le promete al hostelero que podrá formar parte de la vida de su hijo. «Jamás te quitaría el derecho de ser su padre», dice antes de despedirse.Mientras tanto, Nil descubre que está esperando una…¡Niña!

        Después de tres meses, Derya recibe una feliz visita. Se trata de Kadir, el viejo amigo de Aras. El hombre le prometió a la doctora que volvería a Tekirdag para estar con ella y ha cumplido su promesa. Parece que, luego de mucho esperar, el amor, finalmente, ha llegado a la vida de la mujer. «No podía dejar pasar más tiempo, necesitaba verte y empezar de nuevo esta historia, nuestra historia», dice él antes de abrazarla.

        Veinte años más tarde, Zeynep y Ali están más unidos que nunca

        Mientras tanto, Asya se despide de sus seres queridos y pone rumbo a Londres. Allí, Ali estudiará la carrera que elija y ella, tras mucho tiempo, podrá darse la oportunidad de ser feliz. Le devuelve a Derin todo el dinero y las propiedades que Volkan puso a nombre de Ali y, también, vende la casa que fue su hogar durante tanto tiempo.

        Mientras tanto, Volkan luce un aspecto muy descuidado. Ya nada queda del importante arquitecto que fue antaño. Con una larga barba y la mirada triste, se dedica a recordar lo feliz que fue en el pasado y todo lo que terminó perdiendo por sus malas acciones. Ha terminado pagando todo el daño que hizo.

        Por otro lado, Onur, a base de paciencia y tesón, se ha ganado un hueco en la vida de Derin. La chica es muy feliz con el abogado y con su pequeña Zeynep. Ahora sí, disfruta de una relación sana, transparente y pura. Donde los celos y las mentiras no tiene cabida. A su vez, Gönul ha recuperado la sonrisa viendo a sus hijos felices y se dedica a disfrutar al lado de su inseparable Cavidan.

        Veinte años más tarde, Ali regresa a Tekirdag de visita, con su madre. Con un ramo de flores blancas en la mano y con Zeynep de la mano, visita la tumba de Volkan. A pesar del mal que les hizo, le han perdonado por sus errores y ahora miran al futuro llenos de esperanza, porque si algo han aprendido es a no vivir con rencores.


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