Este pasado lunes, Reino Unido vivía una jornada histórica con el multitudinario funeral de Estado de Isabel II, que fallecía el pasado 8 de septiembre a los 96 años de edad. Una ceremonia que tuvo lugar en la abadía Westminster y dejó imágenes para el recuerdo, imágenes que quedaran para siempre en los libros de historia. Una de ellas, la que nos permitió ver juntos a los actuales Reyes de España, Felipe y Letizia, y los reyes eméritos Juan Carlos I y Doña Sofía. Desde enero de 2020 no éramos testigos de un encuentro familiar de estas características.
A pesar de la repercusión lograda, esta no iba a ser la única imagen de la reina Sofía que quedaría grabada en la memoria del público español. Sería en el servicio religioso que tuvo lugar en el Palacio de Windsor, previa al entierro de la reina Isabel II en la capilla de San Jorge, donde la monarca emérita conseguiría eclipsar las miradas, al menos entre el público millennial.
Sin la presencia de Juan Carlos I ni de Doña Letizia y agarrada de la mano de su hijo, Felipe VI, Doña Sofía acudía a darle el último adiós a Isabel II llevando el móvil colgado del cuello con un sencillo cordón negro a modo bolso, un complemento que minutos antes no había utilizado y que destacaba sobre el acertado abrigo de tweed con lazos y pequeños detalles brillantes que seguía con minuciosidad el estricto protocolo británico.
Un detalle tan habitual como significativo que no ha tardado en generar debate a través de las redes sociales. «Hay cosas fuertes en la vida y luego está la Reina Sofía llevando colgando el móvil en el entierro de la Reina Isabel II», escribía un usuario en Twitter junto a la imagen de Felipe y Sofía en un tweet que ya acumula miles de likes y comentarios.
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