Sin duda la boda de Iman de Jordania ha sido el gran acontecimiento royal del fin de semana. Tanto la novia como su madre eligieron vestidos de Dior para uno de los looks más importantes de su vida. Pero la moda española también tuvo hueco en esta gran celebración de la realeza jordana, con la presencia de la firma de invitadas Metanoia. Las encargadas de lucir sendos vestidos de esta marca española fueron Sara y Aisha Bint Al Faisal, sobrinas de Rania de Jordania.
Las jóvenes, hijas del príncipe Faisal, hermano del rey Abdullah, y de la princesa Alia Tabbaa, decidieron acudir a la boda de su prima con el mismo vestido en distinto color y optaron por el modelo Tango, uno de los más elegantes de la colección de invitada de Metanoia. Se trata de un diseño de largo tobillero, cuello alto con lazada y manga corta abullonada, «inspirado en las musas de los años 30», según explica Alejandra Raventós, fundadora y diseñadora de la firma.
Sara y Aisha, de 25 años, optaron por los modelos en color rosa cereza y en azul aguamarina y complementaron el look con una coleta alta y con zapatos de tacón metalizados, una de las tendencias más repetidas de la temporada en los looks de invitada.
Metanoia, la firma española en la boda de la hija de Rania de Jordania
Metanoia fue creada hace dos años por Alejandra Raventós, que decidió apostar por la moda sostenible, hecha en España, y cuidando cada detalle de sus diseños. Fue el pasado mes de octubre cuando Raventós lanzó su primera colección de trajes de fiesta y, tras el éxito cosechado, ya están trabajando en la segunda colección. Sus diseños se caracterizan por ser muy favorecedores, con guiños vintage, llenos de color y elegancia atemporal. Los colores lisos y las siluetas que marcan la figura también son reconocibles en su diseño.
Además de un estilo muy característico, Metanoia también apuesta por la moda lenta: prendas duraderas y de calidad que contribuyan a conservar el planeta y que, al mismo tiempo, tengan un impacto positivo en la vida de todos los implicados en el proceso. Sus colecciones se producen en talleres locales, donde se cuida éticamente a todos los miembros del equipo.
De hecho, la firma trabaja con la asociación APRAMP, que enseña el oficio de la costura a mujeres rescatadas de las mafias de la trata, ayudándolas así en su proceso de reinserción social. Además, los tejidos con los trabajan están elegidos a conciencia: el 80% de la colección de trajes de baño está creada con VITA®, un tejido italiano fabricado con plástico reciclado del océano. Y al menos el 50% de los tejidos que utilizan son reciclados, 100% naturales, biodegradables o upcycled (existencias).
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